Los niños chinos con distintas capacidades tienen muchas dificultades para acceder al sistema educativo, debido a los escasos medios de los que disponen y a sus reglas estrictas, afirmó el lunes la ONG estadounidense Human Rights Watch.

“En las escuelas de formación general, los niños con una discapacidad leve afrontan desafíos importantes. Pero estamos sobre todo preocupados por el destino de los niños con una discapacidad severa. Están totalmente excluidos del sistema educativo”, explica Sophie Richardson, responsable para China de la ONG, en un informe elaborado tras 62 entrevistas llevadas a cabo en ese país.

El informe asegura que los niños chinos discapacitados que siguen estudiando después de primaria son pocos.

Según Richardson, cualquier examen de admisión a una universidad china debe ser precedido de un examen médico durante el cual los candidatos deben señalar las discapacidades que padecen.

Además, señala el informe, no se hace ningún esfuerzo para ayudar a los alumnos con discapacidad auditiva o visual durante las pruebas del “gaokao” con las que los jóvenes terminan estudios secundarios.

EL informe señala que China sí implementó escuelas adaptadas a las necesidades de los alumnos discapacitados. Pero éstos tienen muy pocas veces la posibilidad de desembocar en carreras generalistas.

Basándose en cifras oficiales, la ONG, con sede en Nueva York, explicó que el 28% de los niños con diferentes capacidades no van a la escuela.

“Pienso que un gobierno que financia un programa espacial y representa la segunda economía mundial sin dudas tiene los medios para resolver estos problemas”, consideró Sophie Richardson.

Unos 83 millions de chinos, niños y adultos, sufren algún tipo de discapacidad, según las cifras oficiales que menciona el estudio.