La Iglesia católica de Bolivia denunció una “ola de robos” contra templos en varios poblados del país y teme que los responsables pertenezcan a una “banda internacional”, afirmó este miércoles la jerarquía eclesiástica.

“La Conferencia Episcopal Boliviana expresa su honda preocupación por la ola de robos perpetrados en los últimos meses en templos y santuarios que albergan un valioso patrimonio religioso, histórico y cultural de los bolivianos”, dijo el secretario de la CEB, párroco Giovani Arana en una conferencia de prensa.

Desde marzo cinco templos sufrieron robos de sus patrimonios, como piezas de oro y plata, y el más grave se registró el lunes en el santuario de Copacabana, 156 km al este de La Paz y sobre la frontera con Perú, de donde se sustrajeron 18 piezas valiosas de las imágenes de la Virgen de la Candelaria y de su Niño Jesús.

“Viendo los acontecimientos que han ido sucediendo se piensa en una banda internacional y evidentemente habría actuado con diferentes móviles”, acotó Arana.

La CEB explicó luego a la AFP que desde 2012 se han reportado 20 robos en templos católicos, sin que se lograra capturar a los responsables.