El Jefe de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, Hernán Solis, fue quien confirmó que la esposa de Werner Luchsinger, Vivianne Mckay, se comunicó por celular con uno de sus hijos al momento del atentado.

Ambos cuerpos fueron encontrados calcinados al interior de la casa, en lo que debería corresponder al segundo piso de la vivienda, ya que éste se desplomó quedando al nivel del primer piso.

En tanto, el Ministerio Público estudia invocar la ley que sanciona conductas terroristas, lo que facultaría a los fiscales a cargo del caso para mantener al menos por 5 días a los detenidos en su poder antes de presentarlos a un Tribunal de Justicia.

Hasta el momento se ha logrado establecer que entre 10 a 20 personas ingresaron en un vehículo tras cortar alambres de un cerco perimetral, incendiaron la casa y escaparon.