Nueva Zelanda, vigente campeona mundial, cumplió los pronósticos y se impuso con facilidad a la selección de Escocia, por 51 a 22 (resultado al descanso: 34-17), este domingo en el estadio de Murrayfield de Edimburgo, dentro de su gira europea de amistosos.

Escocia dominó durante cinco minutos, del 14 al 19, después del primer try de Tim Visser tras una pérdida de balón de Dan Carter, pero hasta ahí llegaron las oportunidades locales.

La máquina neozelandesa se puso en pleno rendimiento con hasta seis tries, con un papel destacado especialmente para el wing Julian Savea, con un doblete. Con 21 puntos con el pie de Carter, superaron la barrera de los 50 puntos.

Los números son abrumadoramente positivos para los All Blacks en sus duelos históricos ante los escoceses, con un balance de 27 triunfos y dos empates, el último de ellos en 1983.

Los neozelandeses, campeones del Rugby Championship, el gran torneo del hemisferio sur, no dieron opción a una Escocia que en junio había firmando una gran gira de amistosos, con tres triunfos, incluyendo uno en Australia (9-6).

Los All Blacks continuarán en las próximas semanas su gira europea de test-matches, primero en Italia y luego en Gales e Inglaterra. Hace diez años que no caen en un partido amistoso en Europa, aunque en duelo oficial sí lo hicieron, en 2007 en Cardiff contra Francia, en cuartos de final del Mundial.