El Ministerio de Obras Públicas debió hacer gestiones con la CGE y ponerse al día con el pago de las cuentas, para evitar un corte de la luz en los peajes de Coronel y Chaimávida. La autoridad reconoció que fue un bochorno.
Las patrullas de la Compañía general de Electricidad salieron temprano en dirección a ambas plazas de peaje estatales. Tenían orden de cortar la energía, pues había boletas impagas.
Sin embargo, y mientras se efectuaba el trámite, las autoridades pedían más plazo para pagar y ordenaban las cuentas en Santiago. La CGE dijo que esperaba hasta las dos de la tarde, si el pago no figuraba ingresado se cortaba la luz, pero no fue necesario. El Mop hizo la cancelación.
El seremi de obras públicas Arnaldo Recabarren, quitó importancia al hecho, y dijo que fue un bochorno que no alcanzó a tener consecuencias en la operación de los peajes.
Los peajes de Coronel y Chaimávida están ad portas de ser trasladados de su actual emplazamiento. En ambos casos la comunidad ha efectuado sendas protestas pididiendo su salida.
El de Coronel, según anuncios del ministro Lorence Golborne, será eliminado en marzo, cuando ya comience a funcionar el de Laraquete, producto de la nueva ruta 160 concesionada.
En el caso del de Chaimávida, ubicado en el ingreso a Concepción, se eliminará cuando ya estén funcionando el de Tomeco en la ruta a Cabrero y el de Queime, en el camino a Bulnes.
