En un 9,8% aumentaron los precios de los alimentos en nuestro país en los últimos doce meses, según las estadísticas de febrero recopiladas por la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

El promedio en la variación de precios de los alimentos en Latinoamérica se sitúa en un 8,6%, más de un punto porcentual por debajo respecto a Chile. En otras naciones de referencia como Perú, México o Brasil el alza de sus alimentos no sobrepasó el 6,9%.

De los doce países analizados, las naciones con menores alzas en el valor de los alimentos fueron Paraguay con 0,1% y Bolivia con 1,8%, le sigue Costa Rica con 2,7%, Colombia con 4,7% y Ecuador con 6,1%.

Al respecto, Claudia Meneses, Seremi de Economía, Fomento y Turismo en Antofagasta destaca que “La inflación de alimentos es una tendencia que se viene registrando hace varios años en todo el mundo. Este fenómeno durante el año 2011 llegó a alzas récord en el precio de los comestibles, producto de la inestabilidad política en los países Árabes, proveedores y del gran consumo interno de los países desarrollados”.

Sobre este último punto la autoridad agrega que “En Latinoamérica el escenario no es muy distinto, más aun considerando que nuestro país fue el mayor perjudicado con estas alzas, las cuales registraron un incremento de un 9,8%, posicionándonos como el país con los alimentos más caros de Latinoamérica” comentó.

Especialistas en el tema, plantean que el aumento de los precios se debería principalmente al alza en los combustibles, y a la sequía vivida en el país durante el año pasado, la cual habría ocasionado escasez de alimentos, sobre todo de verduras.

Dusan Paredes, Doctor en Economía Aplicada de la Facultad de Economía de la Universidad Católica del Norte, señaló que “Los precios de los alimentos en Chile se han elevado a una velocidad mucho más rápida respecto a otros países, y esto se debe principalmente a la geografía de nuestro país, ya que posee aproximadamente 4.270 Kilómetros de amplitud territorial, pues al momento de querer importar los productos el hecho de estar situados en un área tan remota el costo en combustible es mayor”.

Asimismo la Seremi puntualizó que “Chile es un país que considera distancias muy largas, lo que obviamente impacta en el traslado de los productos entre regiones, más aún cuando el precio de los combustibles sigue en alza, no considerables, pero sí muy constantes”.