Una polémica de proporciones generó un artículo publicado en la revista británica Journal of Medical Ethics, el cual justifica el infanticio por considerar que un recién nacido es un ser “moralmente irrelevante”.

“Aborto después de nacer: ¿Por qué el bebé debería vivir?”, es el nombre del ensayo de los especialistas Francesca Minera y Alberto Giublini, docentes de la Universidad de Bolonia y Milán respectivamente, quienes señalan que “el estatus moral de un bebé es equivalente a la de un feto, en el sentido de que ambos carecen de las propiedades ligadas al derecho a vivir”.

En este sentido, indican que los recién nacidos son “moralmente irrelevantes”, por lo tanto, sus padres o los médicos deberían poder decidir si una guagua debiera seguir viviendo, especialmente cuando el neonato nace con alguna discapacidad o no es deseado por sus progenitores.

“Solo el 64% de los casos de Síndrome de Down en Europa se diagnostican mediante pruebas prenatales”, afirman para fundamentar su teoría.

De acuerdo a Minera y Giublini, los lactantes son “seres humanos, pero sólo personas en potencia”, agregando que “ni fetos ni neonatos son personas en el sentido de sujetos que tienen un derecho moral a la vida”. Por lo tanto, creen que debería estar permitido terminar con la existencia de un bebé luego de nacer porque sería lo mismo que abortar. Además consideran que sería más apropiado usar el concepto “aborto después de nacer” en lugar de “infanticidio”.

Tras estas polémicas declaraciones, varias organizaciones defensoras de la familia criticaron el artículo. Ante esto, el editor de la revista, Julian Savulescu, defendió la nota publicada en el medio, expresando que todo esto ya lo habían dicho los “más eminentes filósofos y especialistas en bioética del mundo, incluidos Peter Singer, Michael Tooley y John Harris”. Savulescu añadió que quienes han manifestado su molestia por el ensayo, son unos “fanáticos que se oponen a los auténticos valores de una sociedad liberal”, consigna ABC.