Una nueva interpretación de los glifos mayas -aquellas representaciones gráficas de un carácter- en la zona arqueológica del Tortuguero (Tabasco), permitieron postular que las predicciones mayas para diciembre de 2012 no aluden al “fin del mundo”… sino que al regreso del dios Bolon Yokte que volvería para vigilar el término de una era y el comienzo de otra.

Según los expertos Sven Gronemeyer y Barbara Macleod, de la Universidad de La Trobe (Australia), la mítica fecha 21 de diciembre de 2012 -citada en los glifos estudiados- ha generado un sinfín de especulaciones sobre el apocalípsis.

No obstante, estas suposiciones han sido rechazadas por epigrafistas y arqueólogos, según indicó la Agencia EFE.

De acuerdo a Gronemeyer y Macleod, en realidad se trataría de la transición de un ciclo a otro y el término de una era que comenzó el 13 de agosto del año 3.114 A.C; hecho que no tendría nada de apocalíptico.

Finalmente, cabe indicar que los especialistas dieron a conocer esta nueva interpretación durante la VII Mesa Redonda de Palenquie, celebrada en Chiapas.