Un grupo de mercenarios sudafricanos aún se encuentra en Libia e intenta sacar del país a Saif al Islam, hijo de Muamar Gadafi, afirma el periódico sudafricano Beeld este jueves.

Otro rotativo sudafricano en lengua afrikáans, Rapport, que cita fuentes no identificadas, había anunciado el domingo que 19 mercenarios de Sudáfrica fueron contratados por uno o varias empresas sudafricanas vinculadas a Gadafi para participar en la protección del coronel y de sus allegados.

Saif al Islam, considerado como el posible sucesor de Gadafi durante los últimos años del régimen del coronel libio ultimado el jueves pasado, había huido de Trípoli con su padre y su hermano Muatasim durante la batalla por la capital libia en agosto para refugiarse en Sirte. Muatasim murió al igual que su padre el jueves pasado, pero Saif al Islam escapó de las tropas del Consejo Nacional de Transición libio (CNT).

Según un responsable tuareg el hijo de Gadafi habría viajado el martes a la frontera con Níger para buscar refugio.

Beeld informa este jueves que en Johannesburgo y en Sharjah, en los Emiratos Arabes Unidos, hay aviones posicionados para buscar a los mercenarios -y eventualmente a Saif al Islam- cuando la situación lo permita.

A finales de agosto informaciones de prensa habían indicado que un grupo de sudafricanos había escoltado de Trípoli hacia Niamey oro, divisas extranjeras y diamantes por cuenta de Gadafi.

A fines de agosto los mercenarios sudafricanos también habrían ayudado a la esposa de Gadafi, Safiya, a su hija Aisha y a dos de sus hijos, Hannibal y Mohamed, a huir por el avance de los rebeldes, informa Beeld.

El domingo, Rapport afirmó que al menos dos mercenarios sudafricanos murieron en el ataque del convoy de Gadafi por la aviación de la OTAN. Otros habrían resultado heridos y aún se encontrarían en Libia.

El ministerio sudafricano de Relaciones Exteriores no quiso comentar estas informaciones.