El imán radical yemení-estadounidense Anwar al Aulaqi, vinculado a Al Qaida y buscado por Estados Unidos, resultó muerto, anunció el viernes el ministerio yemení de Defensa.

“El dirigente terrorista de Al Qaida, Anwar al Aulaqi, resultó muerto junto a miembros de esta organización que se hallaban con él”, anunció un portavoz del ministerio, citado por la televisión estatal.

El ministerio no precisó las circunstancias de la muerte de Anwar al Aulaqi pero fuentes tribales indicaron a la AFP que pereció en un bombardeo aéreo lanzado el viernes por la mañana contra dos vehículos que circulaban entre Maarib (al este de Sanaa) y Juf, provincia desértica limítrofe con Arabia Saudita.

“El ataque fue llevado a cabo por aviones estadounidenses” indicó una fuente tribal, y añadió que la zona era sobrevolada desde hace algunos días por aviones no identificados.

Anwar Al Aulaqi había escapado a un bombardeo estadounidense en Yemen, a principios de mayo, días después de que un comando norteamericano matara en Pakistán al jefe de Al Qaida, Osama bin Laden, anunciaron entonces un responsable yemení y un miembro de su tribu.

Considerado por Estados Unidos como una amenaza tan grande como bin Laden, Anwar Al Aulaqi habría mantenido según Washington vínculos con el nigeriano Umar Faruk Abdulmutallab, autor del fallido atentado del 25 de diciembre de 2009 contra un avión de línea norteamericano.

Al Aulaqi también es conocido por haber mantenido correspondencia con el comandante estadounidense Nidal Hassan, presunto autor del tiroteo que dejó 13 muertos en la base de Fort Hood (Texas) en noviembre de 2009.

Washington consideraba al imán como uno de los objetivos a eliminar. Las autoridades yemeníes intentaron liquidarlo durante un bombardeo aéreo de la aviación de Yemen el 24 de diciembre de 2009 en la provincia de Chabwa, que causó 34 muertos.

Pero Al Aulaqi no se hallaba ahí en el momento del bombardeo, según los servicios de seguridad.