Las medidas compensatorias del Gobierno Regional dirigida a los campamentos de Dichato, contemplan ayudas de emergencia que no llegarán por igual a todos los damnificados de la región; situación que podría desatar un conflicto mayor en el resto de las aldeas.

77 campamentos en la Región del Bío-Bío, que desde el terremoto y tsunami a la fecha han atravesado dos inviernos, han convivido con la humedad, las goteras y el frío; y ya con el paso de los meses, la desesperación los ha llevado a movilizarse. En ocasiones anteriores lo hicieron los damnificados de Villa Futuro con una huelga de hambre, por estas semanas fue Dichato y sus tres aldeas; ambos consiguiendo finalmente la atención de la autoridad y compensaciones a su condición de damnificados.

Pero, ¿cuáles serán las compensaciones de Gobierno que irán a todos los damnificados?. Obviamente un futuro proyecto habitacional que los saque de los campamentos, al que se dio cabida también con subsidios dirigidos a los solteros, que no estaba considerado hasta las manifestaciones de Dichato, pero las controvertidas canastas familiares y los bonos de mantención sólo será para quienes realmente lo necesiten. De momento, según el Intendente del Bío-Bío, Víctor Lobos, en ese contexto sólo se considera Dichato.

Estos llamados paleativos especiales que no van a todas las llamadas aldeas, fueron criticados por el alcalde de Lota Jorge Venegas, quien en su comuna registra 5 campamentos.

Desde el oficialismo, el UDI Guillermo Cáceres, Alcalde de Penco, comuna que registra 4 campamentos, pedirá igualar las demandas de Dichato y hacerlas extensiva a todos los campamentos.

La bola de nieve para el Gobierno proviene del petitorio de 15 puntos presentado por los damnificados de Dichato a las autoridades, en el cual piden una vivienda digna, un bono de invierno, canastas familiares de emergencia, subsidios para sus cuentas de energía eléctrica; problemas que afectan por igual a la totalidad de los campamentos de la región.